Hala Lach Hab El Keneksi, Rebeca Jiménez Uvidia y Chaimae El Idrissi Loukili son las autoras de ‘La sal de la muerte (celular)’, una de las imágenes científicas más destacadas del 2023
Esta semana, FOTCIENCIA ha dado a conocer las mejores fotografías científicas del año, y entre ellas está la de Hala Lach Hab El Keneksi, Rebeca Jiménez Uvidia y Chaimae El Idrissi Loukili, estudiantes del IES San Cristóbal de los Ángeles (Villaverde), centro educativo que forma parte de la red de Ciencia en el Barrio en Madrid.
‘La sal de la muerte (celular)’ es el título de su imagen, premiada en la modalidad La ciencia en el aula en la vigésima edición de FOTCIENCIA. Se trata de una iniciativa del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) que acerca la ciencia a la sociedad a través de la imagen.
<<Fue una cosa improvisada. Estábamos haciendo una práctica de laboratorio con estas chicas de 2º de Bachillerato. De repente, ellas empezaron a hacer unas fotos y dije: “Esto está muy bien”. Pocos días antes había recibido la convocatoria y les hice la propuesta, y les encantó. Estuvieron viniendo en horas extra para repetir las fotos y elegir las mejores. Estamos contentísimas>>, comenta Silvia Munguía, su profesora de Biología y coordinadora de Ciencia en el Barrio en su centro.
Esta es la descripción con la que las autoras acompañan la fotografía ganadora:
De izquierda a derecha en la imagen, se observan tres muestras de epidermis de flor de caléndula en agua destilada (medio hipotónico), agua potable (de grifo) y agua con sal (medio hipertónico). Comparando las tres situaciones se aprecia cómo, debido al proceso de ósmosis, las células van perdiendo turgencia progresivamente hasta terminar deshidratándose, lo que puede desembocar en un fenómeno denominado plasmólisis durante el cual la célula se arruga hasta poder incluso producirse el colapso de la pared celular y, por tanto, su muerte.
Podríamos asimilar lo que ocurre en estas preparaciones con el efecto que tiene la salinización del suelo sobre las células de las plantas cultivadas y silvestres. Con frecuencia, la degradación del suelo se debe a la acción antrópica y es consecuencia de una implementación deficiente en las técnicas de mantenimiento del terreno de cultivo, principalmente en el contexto de la ganadería y la agricultura intensivas. La progresiva sustitución de estas técnicas por otras más sostenibles es fundamental para mantener la fertilidad de los terrenos cultivables.
